El buque salió del muelle y procedió a realizar pruebas de mar después de un periodo prolongado en dique seco, durante el que se había trabajado en los dos motores principales. Un especialista en vibraciones y un inspector de la Sociedad de Clasificación estaban también a bordo. Los dos generadores estaban en marcha y conectados al cuadro eléctrico.
Mientras el barco estaba aún dentro del rompeolas, el jefe de máquinas desconectó uno de los generadores del cuadro eléctrico pero lo dejó funcionando en modo de enfriamiento. No informó al puente de lo que había hecho.
El segundo de máquinas estaba en la sala de máquinas, al lado de los generadores, ayudando al especialista en vibraciones a hacer lecturas de la reductora. Notaron que una conducción de combustible de alta presión se había rajado y estaba rociando aceite sobre el colector de escape caliente.
El segundo de máquinas apretó el botón de paro de emergencia del generador y el buque sufrió un fallo eléctrico total justo cuando pasaba el rompeolas. Como resultado, se perdió todo el control de la navegación pero afortunadamente el generador de emergencia arrancó y el suministro eléctrico se restableció rápidamente.
El jefe de máquinas en la Sala de Control de Máquinas debería haber solicitado permiso al puente antes de cambiar el régimen de la maquinaria del buque, de manera que el puente estuviera siempre al tanto de las limitaciones de potencia y propulsión – especialmente durante las maniobras de entrada y salida de puerto. Dado que la conversación se habría emitido por los altavoces de la sala de máquinas, los que estuvieran allí habrías sabido que sólo había un generador suministrando energía al buque.
Después de un periodo prolongado en dique seco, y especialmente cuando el estado material del buque ha cambiado, se deben revisar los peligros y las evaluaciones de riesgo y se deben reforzar los controles, por ejemplo, aumentando el personal de guardia en las salidas de puerto.
Comunicaciones – Se debe reforzar el restablecimiento de los procedimientos estandar de comunicación, particularmente tras un tiempo prolongado en dique seco. Desconectar el generador de la línea de suministro y no comunicarlo al equipo de la sala de máquinas ni al puente no fue seguro.
Trabajo en equipo – Se requiere un nivel elevado de trabajo en equipo para garantizar que la sala de máquinas, que ha estado sujeta a ajustes y reparaciones por parte de contratistas externos y del personal del buque, está en condiciones de navegar. Considere aumentar la guardia de navegación para el primer día y primera noche en el mar. Esto reduce el riesgo de que algo vaya mal.
Distracciones – Comprobar que el estado de la sala de máquinas y todos los equipos auxiliares funcionan debe ser la prioridad, y nada debe distraer al equipo de la sala de máquinas de esta tarea.
Competencia – Las operaciones en dique seco requieren que el personal del buque posea una buena adaptabilidad operativa y una conocimiento extenso del nivel de riesgo. La dirección debe asegurarse de que determinados miembros de la tripulación tengan esos conocimientos cuando planeen las varadas.